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Se realizó la IX Asamblea Ordinaria de la Asociación Mexicana de Órganos de Control de Vigilancia en Instituciones de Educación Superior

   Con el propósito de continuar difundiendo los conocimientos y experiencias que se realizan en las instituciones de educación superior en materia de control y vigilancia, la Asociación Mexicana de Órganos de Control de Vigilancia en Instituciones de Educación Superior (AMOCVIES), llevó a cabo, en la Universidad Autónoma Metropolitana, su IX Asamblea Ordinaria.

Con la participación de representantes y responsables de 46 instituciones de educación superior del país y funcionarios de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), se analizaron temas como la visión estratégica de la Auditoría Superior de la Federación, el perfil de los titulares de los órganos de control y vigilancia, la problemática de las pensiones y jubilaciones, el papel del contador público en los órganos de control y vigilancia, el dictamen del auditor externo en el proceso de rendición de cuentas, entre otros.

Asimismo, se contó con la participación de diputados federales y presidentes de las comisiones responsables de esta materia, quienes participaron, junto con el secretario general ejecutivo de la ANUIES, Jorge Luis Ibarra Mendívil, en una mesa redonda sobre el significado de la rendición de cuentas en las instituciones públicas de educación superior.

Ahí, Ibarra Mendívil comentó que la rendición de cuentas implica tener sistemas institucionales que den confianza, claridad y transparencia sobre el manejo de los recursos financieros de las universidades.

El compromiso de la rendición de cuentas, continuó, no se circunscribe únicamente al aspecto financiero, sino que también incluye el dar cuenta de los resultados académicos, pues la sociedad debe estar al tanto de la calidad de los programas y de los logros institucionales.

Dijo que uno de los compromisos de la educación superior es construir un concepto de universidad transparente y abrir la información a procesos como la admisión, la contratación, la promoción de profesores, los criterios de sus comisiones dictaminadoras a fin de poder exigir mayores recursos.

Además, señaló que las universidades tienen la responsabilidad de que los procesos de fiscalización sean eficaces pero no costosos, y que la autonomía no debe constituirse en una muralla para no rendir cuentas. Las universidades son parte de la sociedad y tienen una responsabilidad política ante los órganos del Estado, aseveró.

Por último, dijo que la rendición de cuentas es un elemento esencial para evitar y prevenir el abuso del poder, así como para dignificar la gestión pública y transmitir la confianza a la sociedad.

Durante la Asamblea, Arturo González de Aragón, auditor superior de la Federación, afirmó durante su conferencia, que los valores éticos y morales han estado ausentes de los programas educativos de este país, por lo que será necesario fiscalizar los contenidos de planes y programas de la Secretaría de Educación Pública a fin de evaluar si los elementos que los integran forman parte importante de la formación escolar.

Agregó que la rendición de cuentas es una tarea obligatoria y parte esencial de una verdadera reforma del Estado y elemento fundamental para una democracia plena.

Por su parte, Luis Mier y Terán, rector general de la UAM, entregó los estados financieros de la institución, correspondientes a los años 2000 y 2001 al auditor superior de la Federación, y señaló que el desarrollo de los procedimientos legales e institucionales para lograr una efectiva rendición de cuentas en el ejercicio de las funciones públicas, no sólo es una respuesta contra la inmoralidad y la ineficiencia, sino un instrumento de control que constituye un mecanismo extraordinario para conocer el estado que guardan las instituciones y que, además, permite adoptar medidas adecuadas para el ejercicio de sus funciones.

Agregó que las IES tienen la obligación de cumplir con el desafío de establecer reglas claras de previsión y control, así como mecanismos que amplíen las posibilidades de observación y evaluación, para que fortalezcan la capacidad institucional de procesar su propia complejidad en el marco de la autonomía y de frente a la sociedad.

Jorge Huerta Vázquez, contralor de la UAM y tesorero de AMOCVIES consideró que la construcción de la cultura de la rendición de cuentas debe significar el cumplimiento permanente de un mandato normativo, con la convicción de responder a un requerimiento de la sociedad y de nuestra comunidad universitaria de ser informados sobre el uso de los recursos que reciben las instituciones.

Aseguró que los registros contables de los hechos económicos de una organización permiten presentar informes financieros que materializan la rendición de cuentas; el acceso al ejercicio presupuestal, su origen, distribución, uso y destino de los recursos, define la trasparencia presupuestaria.

Por último, Fernando Serrano Migallón, director del la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México, comentó que la nueva Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, está compuesta por una estructura administrativa, los derechos que se dan a los ciudadanos para conocer datos confiables y por la obligación de las administraciones federales de proporcionar esta información y subrayó que para que esto se lleve a cabo, es necesario que las IES establezcan un reglamento antes del 12 de junio de 2003.

 

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