La educación superior está siendo desafiada en una era en la que el dominio del saber se constituye como principal poder de desarrollo de los pueblos. Encontrar el equilibrio entre la búsqueda del conocimiento y el servicio directo a la sociedad, entre la formación general y la especializada entre las respuestas a las necesidades presentes o descubrir nuevas formas y métodos para responder a los retos del futuro y en forma especial, la correspondencia en la relación que se establece entre los mundos de la educación y del empleo, son entre otros, los grandes retos que enfrentamos los sistemas educativos a este nivel.

En México, los efectos de la globalización y la liberalización en un contexto económico, político, social, cultural y legal, no del todo preparado para ello, ha reforzado la polaridad en la sociedad: Una minoría moderna, abierta al mundo, ha logrado insertarse exitosamente al nuevo ambiente cultural y de negocios, mientras que una mayoría se ve circunscrita a las preocupaciones de la supervivencia cotidiana y prácticamente se ha marginado del desarrollo económico y social. Todo ello, constituye una honda preocupación para la universidad, la cual además, se ha visto seriamente afectada por la repercusión que dicho fenómeno tiene sobre sí misma.

Ante la nueva realidad imperante, se deben diseñar nuevos modelos, emprender nuevos métodos y prácticas que permitan hacer verdaderamente de la educación superior una palanca para el desarrollo de la sociedad. Reflexionar en la elaboración de modelos para las universidades que permitan la satisfacción de la demanda de todos los involucrados en el proceso educativo, tales como: los usuarios externos, los alumnos, los maestros y los procesos administrativos, es una necesidad que finalmente impactará en el futuro de cada una de nuestras instituciones. Por ello, el mejorar los canales internos y externos de comunicación y entendimiento, así como organizar los procesos académicos y administrativos para responder mejor a la demanda de quien sostiene su existencia, es una condición para nuestra permanencia y desarrollo.

En su caminar el ITSON no ha estado exento de problemas, sin embargo, algo que le ha permitido mantener el rumbo y ser capaz de superar los múltiples obstáculos que la realidad contemporánea impone, es haber mantenido siempre un estrecho contacto con la comunidad. Agradezco a todos ustedes la oportunidad que se nos ha brindado como institución de poder atenderlos y créanme que procuraremos ofrecerles todas las facilidades para que los propósitos de tan importante reunión para la vida de nuestras universidades públicas y del país logre sus objetivos.

Sean bienvenidos y mucho éxito.

El destino de la educación superior define el destino
de nuestro país. Víctor Galindo Sánchez

(Texto completo de su mensaje)

Agradezco muy cumplidamente la excepcional oportunidad de asistir con la representación del gobernador del estado Armando López Nogales al inicio de los trabajos de la decimotercera sesión ordinaria del Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines, los que durante dos días se realizarán en las instalaciones de esta casa de estudios del sur de nuestra entidad: El Instituto Tecnológico de Sonora, a cuyo rector, Oscar Russo Vogel agradecemos su gentil hospitalidad.

Conscientes estamos de que el destino de la educación superior en México, define el destino de nuestro país.

Hemos sido testigos y comprometidos coadyuvantes de las políticas federales que el presiente Ernesto Zedillo ha venido impulsando a través del secretario de Educación Pública, Miguel Limón Rojas, con el apoyo insustituible de los señores subsecretarios, en la permanente procuración de una educación que fortalezca los requisitos de cobertura, eficacia, calidad, pertinencia, equidad y coordinación.

Muchas de las metas planteadas en el Plan de Desarrollo Educativo 1995-2000 han sido superadas, en los diversos niveles pero tenemos, todos, la “serena urgencia” de lograr mayores avances posibles en los meses por venir. Queremos que el siglo XXI encuentre a nuestro país e instituciones, en pleno enriquecimiento de una mejor calidad de vida de los mexicanos, a través de una “educación para la vida, a lo largo de toda la vida”.

Temas como el financiamiento y los retos de la educación superior para el nuevo siglo, analizados cuidadosamente por las autoridades educativas así como por los señores rectores y directores de las instituciones de educación superior, serán debidamente procurados y definidos en este foro de excelencia, lo que habrá de redefinir y fortalecer las estrategias del proceso de mejoramiento continuo de la educación superior, en armonía con el compromiso común con la calidad y competitividad que nos exigen en el entorno nacional e internacional.

Por ello, con la expresión más amistosa de bienvenida, saludo a cada uno de los distinguidos visitantes. Sonora se honra con su presencia y con el fruto de sus análisis y aportaciones en beneficio de la educación superior de México.