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Iniciaron su gestión los rectores de tres universidades y los directores
de tres institutos tecnológicos

Sylvia Ortega Salazar, quien hasta principios de junio se desempeñaba como directora de Becas y Asuntos Internacionales del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, fue designada como Rectora de la Universidad Pedagógica Nacional por acuerdo del Presidente de la República.

Miguel Limón Rojas, secretario de Educación Pública, dio posesión de su cargo a Sylvia Ortega, y señaló que su experiencia y desarrollo intelectual le permitirán asegurar el liderazgo académico necesario para lograr los avances que requiere la UPN.

Sylvia Ortega, quien es licenciada en Sociología y cuenta con estudios de maestría en la Universidad de Wisconsin y de doctorado en Sociología Rural en la Universidad de Texas y en Educación por la Universidad de Denver, sustituye en el cargo a Jesús Liceaga.

La hoy rectora de la UPN dirigió la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana, además de haber ejercido la docencia por espacio de 20 años.

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En la Universidad Autónoma de Baja California Sur también se llevó a cabo el proceso de sucesión en la Rectoría, y el pasado mes de junio fue designado para ocupar dicho cargo Jorge Alberto Vale Sánchez, quien, durante su toma de posesión dijo que su proyecto se basará en una administración ética, honesta y responsable.

Jorge Alberto Vale Sánchez, estará al frente de la Universdiad durante el periodo de 1999-2002. Es egresado de la Facultad de Matemáticas de la Universidad de Sonora, y cuenta con el grado de maestría en Ciencias por la San Diego State University. Ha participado en diversos cursos, talleres y simposia, es coautor del libro Liderazgo Profesional, ha publicado artículos en revistas especializadas.

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En la Universidad Autónoma de Tlaxcala, el H. Consejo Universitario designó como rector para el periodo 1999-2003 a Héctor Ortiz Ortiz, quien sustituye en el cargo a Alfredo Vázquez Galicia.

Héctor Ortiz Ortiz reafirmó, durante la toma de protesta, su compromiso de servir a la Universidad y reconoció la labor de su antecesor.

El nuevo rector de la UAT ha ocupado diversos cargos en la administración pública, así como en el ámbito educativo de los que destacan: secretario de Educación Pública del estado de 1990-1991, Diputado Federal de 1991 a 1994, y dentro de la UAT ha sido Director del Departamento de Idiomas de 1975 a 1978, Director del Departamento de Derecho y Rector durante el periodo 1983-1987.

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El Instituto Tecnológico de Puebla, desde el pasado mes de abril, cuenta con nuevo director. Gerardo M. Lara Orozco fue designado por la Dirección General de Institutos Tecnológicos, para dirigir al ITP.

Gerardo Lara Orozco se venía desempeñando desde 1994 como director del Instituto Tecnológico de Zacatepec hasta el pasado mes de abril. Es ingeniero químico y cuenta con el grado de maestría en Ciencias en Ingeniería Química avanzada, grado que obtuvo en la Universidad de Manchester, Inglaterra.

El nuevo director del ITP fue de 1990 a 1993 subdirector del IT de Chilpancingo y ha recibido capacitación directiva en Estados Unidos, Canadá y Japón; además de 1996 a 1998 fue integrante del Consejo Nacional de la ANUIES.

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Por otra parte, en el Instituto Tecnológico de Zacatepec fue nombrado como director José Luis Morales Lucas, quien desde 1997 se desempeñaba como subdirector de esta institución.

Morales Lucas es egresado del Instituto Tecnológico Regional de Oaxaca, en donde obtuvo el título de ingeniero civil, con especialidad en Desarrollo de la Comunidad; realizó estudios de maestría en Ciencias de la Planificación de Asentamientos Humanos en la Universidad Autónoma de Nuevo León. Ha desempeñado en diversos cargos académicos y directivos y asistido a cursos, seminarios y talleres de especialización y actualización tanto en el extranjero como en nuestro país.

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En el Instituto Tecnológico de León, se nombró como nuevo director a Carlos Aguilera Batista, sustituyendo en el cargo a José Angel Gámez Hernández, quien estuvo al frente del ITL de 1996 a 1999.

El nuevo director del ITL señaló que dirigir esta institución representa un privilegio y un reto, pues esta institución tiene un rumbo claro, y una dinámica de trabajo armónica, enérgica y de plena entrega.

Señaló que el reconocimiento que la sociedad ha dado al ITL no es gratuita, sino que obedece al talento, capacidad y voluntades reunidas en el seno del instituto.