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Inició la Autónoma de Guerrero su proceso de
Reforma Universitaria
Al instalar los trabajos de la Comisión General
de Reforma Universitaria de la Universidad Autónoma de Guerrero, y tomar la protesta a sus miembros, el
rector Florentino Cruz Ramírez, señaló que el principal objetivo consiste en movilizar la
conciencia universitaria hacia la transformación esencial de la Institución.
Señaló que la necesidad de renovar y mejorar
a la UAG es un sentimiento compartido no sólo por la comunidad universitaria, sino por la sociedad guerrerense
en su conjunto, y que en este momento existen las condiciones, no sólo universitarias, sino políticas
y sociales, para que un proceso de esta magnitud se pueda poner en marcha en la Universidad.
Subrayó que el proceso de reforma es un problema
esencialmente de voluntades y de recursos. Vamos a poner a prueba -continuó- nuestras voluntades y nuestra
disposición de que por encima del interés personal, del interés de grupo, está el interés
supremo de nuestra Institución.
El Rector externó que a partir de ahora, las actividades
de docencia, investigación y extensión, se llevarán a cabo paralelamente con los de la reforma
universitaria, que sin duda ocuparán un primer plano en la vida cotidiana de la Universidad.
Por último, manifestó que la reforma aspira
a revisar y modificar de fondo el modelo educativo, la oferta educativa y el conjunto de reglamentos que rigen
la vida universitaria.
Abrirse a las nuevas opciones
Por su parte, Julio Rubio Oca, secretario general ejecutivo
de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), invitado
a la ceremonia, dijo que este proceso no sólo es importante para el desarrollo futuro de la Universidad
Autónoma de Guerrero, sino que resulta fundamental para la transformación y consolidación
del sistema de educación superior del país.
Expresó que para el año 2006 la población
estudiantil estará integrada por cerca de 3 millones de jóvenes, un millón más de los
que actualmente cursan este nivel. Para responder a este reto -continuó- es necesario reformar y replantear
los esquemas dentro de los cuales se ha desempeñado la educación superior.
La universidad, puntualizó Rubio Oca, debe abrirse
a nuevas opciones, y plantear un estadío superior de desarrollo, sin perder de vista las demandas de la
sociedad y los elementos exógenos al sistema para que pueda responder con oportunidad, calidad y pertinencia
de acuerdo con las circunstancias actuales.
Estoy cierto, dijo, que este proceso de reforma podrá
darle a la UAG la posibilidad de continuar con la revisión de su oferta educativa, adecuarla para que sea
más pertinente y garantizar una formación más sólida, más acorde a las necesidades
actuales de formación de profesionales. Es fundamental, insistió, diversificar la oferta educativa
para atender mejor las necesidades de formación de profesionales para el desarrollo del estado.
Propiciar el aprendizaje
El secretario general ejecutivo de la ANUIES explicó
que las nuevas modalidades deben centrarse en el aprendizaje y no en la enseñanza. Tenemos que propiciar
el aprendizaje de los alumnos, el desarrollo de sus habilidades de estudio, pensando que necesariamente a lo largo
de toda su vida tendrán la necesidad de actualizar sus conocimientos, y que por lo tanto, la Universidad
debe contribuir a desarrollar esta capacidad, dijo.
El reto será, expresó, buscar e identificar
los mecanismos que permitan a la institución centrar el eje de su atención en sus estudiantes, estableciendo
los mecanismos pertinentes institucionales para la tutoría de los mismos, con el objeto de mejorar los indicadores
de egreso y titulación, disminuir la deserción y con ello cumplir aún mejor con los propósitos
y la misión que la sociedad le ha encomendado.
Por último, Julio Rubio hizo patente el apoyo
de la ANUIES hacia la Comisión de Reforma, así como para la Universidad en su conjunto.
Convicción de cambio
En su participación, Ramón Reyes Carreto,
secretario general de la Comisión de Reforma Universitaria, señaló que este proceso confirmará
la convicción de cambio de los universitarios guerrerenses, quienes trabajarán en la definición
de una estrategia clara que permita acortar los tiempos y aprovechar las experiencias propias de la Universidad,
así como las de otras instituciones de educación superior públicas.
Pretendemos, dijo Reyes Carreto, construir los espacios
académicos que permitan la reflexión, el desarrollo de propuestas, y sobre todo que debatan y trabajen
en la búsqueda de los consensos necesarios para la reforma.
Por último, señaló que se trabajará
intensamente para que en el mes de octubre estén sobre la mesa de discusión y análisis la
nueva filosofía institucional, un mejor sistema de organización académica, administrativa
y de gestión universitaria, así como un gobierno universitario que garantice un apoyo real a las
funciones sustantivas de la Universidad.
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