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Con delegados de 15 países se realizó en la Universidad Michoacana el V Congreso Iberoamericano de Extensión
Conocer la situación que guarda la Extensión de la Cultura y los Servicios en las instituciones de educación superior de Iberoamérica y su impacto en la sociedad y analizar las experiencias de los programas de extensión y de las áreas que involucran el uso de las nuevas tecnologías de información y comunicación, así como las oportunidades que de ellas se derivan para la ampliación y diversificación de la oferta de servicios de extensión, fueron algunos de los objetivos del V Congreso Iberoamericano de Extensión, México 2000, que se llevó a cabo recientemente en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, bajo el auspicio de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES).
Durante la ceremonia de inauguración, Julio Rubio Oca, secretario general ejecutivo de la ANUIES, dijo que los principales retos de la Extensión radican en su capacidad de innovación, sus formas de organización, así como sus prácticas, para mantener su esencia como espacio de desarrollo social y cultural.
Para lograr lo anterior, apuntó, es necesario desarrollar aspectos como: el uso intensivo de la tecnología de la información y de los medios de comunicación aplicados a esta función; contar con estándares de calidad para cada una de las acciones que se emprendan en esta materia, a fin de evaluar el impacto de las mismas; y diversificar las acciones de servicio con una mejor respuesta a los requerimientos de los diferentes grupos y actores sociales con los que se colabora.
Invitó a los participantes a llevar a cabo una reflexión profunda sobre el papel que deberá corresponder a la función de extensión de las instituciones de educación superior sobre cómo cambiar, qué rumbos tomar y, sobre todo, cuáles valores fundamentales de la vida académica deberán ser preservados.
Durante el Congreso, los más de doscientos participantes, provenientes de Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, Costa Rica, Colombia, España, Panamá, Perú, Honduras, Guatemala, Nicaragua, Uruguay y El Salvador, participaron en cinco mesas de trabajo que se ocuparon de aspectos como:
Mesa 1.- Que abordó todo lo relacionado con el Papel de la extensión de las instituciones de educación superior en la sociedad, a lo largo de la cual se analizaron aspectos como la desvinculación de la extensión de las otras funciones sustantivas, y la falta de reconocimiento institucional hacia las tareas de la extensión, entre otros problemas.
Mesa 2.- Cuya temática fue La extensión y la tecnología: una nueva oportunidad. Se analizó la necesidad de aprovechar el potencial que ofrecen las nuevas tecnologías de comunicación, y cómo generar una cultura de los medios de comunicación. Además, se acordó impulsar la conformación de una red de información de centros de extensión entre todas la universidades de Iberoamérica.
Mesa 3.- Cuyo tema fue Extensión y Sociedad: una relación necesaria, y en la cual los especialistas concluyeron que resulta fundamental la organización-sistematización del área de Extensión de las universidades, la vinculación de los programas universitarios derivados de las funciones de Extensión, con los de Docencia e Investigación, y la vinculación de los programas de extensión con las necesidades sociales.
Mesa 4.- Estrategias de acción y financiamiento para el desarrollo de la extensión, en la que se señaló la urgencia de que la Extensión cuente con recursos propios a través de la competitividad, y la elevación de la calidad de los servicios. Para ello, deberá establecer fuentes alternas de financiamiento por medio de intercambios, contratos y convenios con instituciones gubernamentales, civiles, empresas, instituciones educativas, fundaciones, etc. Además, los integrantes de la mesa propusieron la creación de un centro de proyectos económicos y de apoyo a la extensión educativa, dirigido por especialistas en programación y planeación.
Mesa 5.- Esta mesa versó sobre las Bases para la construcción de programas estratégicos para el desarrollo de la extensión en las instituciones de educación superior, y en la cual se señaló la importancia de que las autoridades otorguen un amplio reconocimiento al trabajo de la extensión. Asimismo, se apuntó que es necesario institucionalizar las políticas de extensión en función de las necesidades socioeconómicas tanto latentes como explícitas.
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DECLARACIÓN DE MORELIA
Los participantes del Congreso emitieron la Declaración de Morelia, en la cual se señala:
1.- Fue establecido el Consejo Directivo de la Unión Latinoamericana de Extensión Universitaria, el cual será encabezado por Lucas Batista Pereira, pro-rector de Extensión y Asuntos Comunitarios de Brasil, en calidad de presidente y como secretaria general, Mariela Torres Pernalete, coordinadora nacional del Núcleo de Directores de Cultura y Extensión de las Universidades Venezolanas.
2.- Establecer una red internacional de información entre las instituciones miembros de la Unión, bajo la responsabilidad de Brasil y México.
3.- Apoyar la realización del VI Congreso Iberoamericano de Extensión Iberoamericana, a celebrarse en el 2001 en Brasil.
4.- Proponer que los subsiguientes congresos se realicen bianualmente.
5.- Que las instituciones de educación superior envíen las sugerencias para perfeccionar el Estatuto de la Unión Latinoamericana de Extensión Universitaria, a más tardar el 30 de marzo del 2001.
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