En tiempos recientes, la extensión de la cultura se ha convertido en el centro de análisis y debate de las instituciones de educación superior, pues esta función sustantiva de la educación influye en el proceso de cambio social y se compromete con los diferentes sectores de la estructura social, afirmó Carlos Pasos Novelo, rector de la Universidad Autónoma de Yucatán durante su intervención en el II encuentro latinoamericano de extensión universitaria que se llevó a cabo el pasado mes de noviembre en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.

Ante representantes latinoamericanos de diversas instituciones de educación superior, Pasos Novelo en representación de la ANUIES, comentó que a través del compromiso que las IES tienen con la sociedad, es posible reconocer las expresiones culturales y las necesidades de la colectividad con el propósito de incorporarlas a la docencia e investigación.

Señaló que la cultura, la extensión universitaria y los servicios, a diferencia de los modelos universitarios anglosajones, es una de las funciones sustantivas de los países latinoamericanas y por tanto debe modernizarse, ampliar su cobertura e impacto social para seguir funcionando como elemento integrador tanto al interior como al exterior de las universidades.

Al referirse a la responsabilidad social y de solidaridad que las instituciones de educación superior tienen para con la sociedad, Pasos Novelo apuntó que la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior ha realizado e impulsado diversas acciones orientadas a organizar y sistematizar esta función, logrando crear una dinámica de trabajo regional que además ha permitido un aprovechamiento óptimo de los recursos.

Esta propuesta regional, continuó, ha permitido concluir que la extensión universitaria requiere de conceptos amplios de la cultura que superen el viejo esquema de las bellas ates, la cultura de la élites y la erudición de salón, hasta alcanzar otros elementos como los valores, las actitudes de respeto de la problemática social y política del país, pasando necesariamente por los aportes propios de las instituciones educativas para el desarrollo social, especialmente de los bienes de la ciencia y la tecnología, sin descuidar la formación integral de los universitarios.

Por lo que respecta al financiamiento de la extensión, dijo que por lo general en Latinoamérica se entablan complejas relaciones entre cultura y economía, entre universidad y mercado, pues se vive en un ámbito en el que las finanzas son críticas y por lo general estas actividades no cuentan con los fondos suficientes para su desarrollo.

Durante cuatro días los especialistas abordaron aspectos como el manejo de la extensión en países latinoamericanos, las relaciones entre la universidad y el sector público, la vida universitaria, perspectivas de la extensión, la extensión como puerta hacia el futuro, la integración y preservación cultural y transferencia de tecnología, entre otros. 

La vinculación entre empresas, sindicatos e instituciones educativas constituye la mejor estrategia para mejorar la formación de recursos humanos capacitados y así aportar soluciones que eleven la productividad de sectores prioritarios para el país, así lo expresaron Diódoro Guerra Rodríguez, director general del Instituto Politécnico Nacional y Francisco Hernández Juárez, dirigente del sindicato de Teléfonos de México.

Durante la ceremonia de entrega de 148 títulos profesionales a trabajadores de TELMEX, señalaron que el ejercicio laboral no debe ser una limitante para elevar la preparación de los recursos humanos, por lo que convenios de colaboración como el establecido entre el IPN y TELMEX permite, a aquellos que por alguna razón interrumpieron su educación profesional, concluir sus estudios y en este caso en particular acreditarlos como ingenieros en telecomunicaciones.

Diódoro Guerra apuntó que sólo con la actualización y capacitación permanente será posible consolidar una planta de recursos humanos que en los distintos ámbitos de la actividad productiva, impulse y fortalezca las perspectivas del desarrollo nacional.

Por su parte, Hernández Juárez dijo que a través de estos esfuerzos y lazos de vinculación entre empresas y el sector educativo, será posible conformar los cuadros que requiere el país para su desarrollo. 

La memoria institucional del Instituto Politécnico Nacional podrá ser consultada en la página Internet del instituto, la cual cuenta con información relativa al ciclo escolar 1995-1996 y en breve esta será sustituida por la versión 1996-1997.

La dirección en la que se puede consultar la memoria e información adicional sobre el IPN es: http://www.sistemas.ipn.mx/memorias.htm 

La Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN) signaron un convenio de colaboración académica, científica, tecnológica y cultural, a través del cual se busca potencializar los recursos académicos y tecnológicos de ambas instituciones.

La UAS impulsará, a través de este convenio, proyectos de investigación conjuntos, así como programas compartidos de actualización, especialización y posgrado. Dentro de este último punto, el rector de la UAS, Jorge Luis Guevara Reynaga hizo la declaratoria inaugural de las maestrías en administración de negocios y administración y desarrollo de la educación, mediante las cuales se pretende formar recursos humanos de alto nivel que satisfagan las necesidades de la entidad. Los posgrados serán impartidos en el Centro de Educación Continua Unidad Culiacán del IPN, utilizando las nuevas tecnologías de comunicación satelital y el sistema interactivo de videoconferencia, y están involucrados 59 catedráticos con grados de maestría y doctorado de la Escuela Superior de Comercio y Administración del IPN.

Durante la firma del convenio, que tuvo como testigo de honor el gobernador del estado Renato Alvarado, Diódoro Guerra, director general del IPN apuntó que la suma de esfuerzos y el desarrollo de proyectos conjuntos permitirá a las instituciones académicas del país extender la cobertura, elevar la calidad de la enseñanza, la investigación, el avance tecnológico y fortalecer su impacto en el desarrollo armónico e integral de todas las regiones de la geografía nacional. 

El Departamento del Distrito Federal informó que en el presente año se han firmado 142 convenios de colaboración con 17 universidades, con el fin de diseñar conjuntamente soluciones a los diversos problemas que aquejan a la capital del país. Así lo informó el responsable del gobierno capitalino para la educación, salud y desarrollo social, Javier Vega Camargo.

El funcionario indicó que la idea de estos convenios es estrechar los vínculos de trabajo con las escuelas y facultades de enseñanza superior para incentivar la participación de los investigadores en estudios urbanos. Señaló que los temas que se incluyen en estos convenios son el desarrollo social, económico y urbano; así como salud y educación. La idea es, agregó Vega Camargo, contar con especialistas que sepan de modernización administrativa, investigación jurídica, prevención sanitaria, colaboración biomédica, transporte, cultura, deporte, ecología, sismología y protección civil.

La institución que más convenios tiene con el DDF es la UNAM con 69, le sigue la UAM con 23 y el IPN con 16. Además se han firmado 11 convenios con la Universidad Iberoamericana; 5 con el tecnológico de Monterrey y 17 con diversas instituciones educativas. 

Con la aprobación del proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, que presentó el Ejecutivo al Congreso de la Unión, se podría contar con un mínimo de 300 millones de pesos adicionales para el Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP), anticipó el subsecretario de Educación Superior e Investigación Científica, Daniel Reséndiz Núñez.

Tal anuncio lo realizó el titular de la SESIC, durante el establecimiento del Programa de Vinculación de Cuerpos Académicos México-Gran Bretaña, para impulsar la investigación y la enseñanza en todas las universidades públicas del país y fortalecer el acercamiento del profesorado de ese nivel entre ambas naciones.

El subsecretario recordó que 49 universidades estatales y 30 mil catedráticos, 40 por ciento de los cuales cuenta ya con posgrado, están integrados al PROMEP, que es un programa de 12 años de duración mediante el cual se busca que los docentes alcancen el perfil deseado en la enseñanza.

Respecto al Programa de Vinculación entre México y Gran Bretaña, Reséndiz dijo que es el resultado del plan que el gobierno federal diseñado, conjuntamente con la ANUIES, para elevar a estándares internacionales la calidad de todos los docentes de instrucción superior.

Las disciplinas contempladas en el programa son Ciencias de la Computación, Ingeniería de Manufactura y Telecomunicaciones; en su primera etapa participan 17 instituciones de educación superior mexicanas y siete británicas.

Las instituciones mexicanas son el Instituto Tecnológico de Sonora, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla; las universidades autónomas de Aguascalientes, Baja California, Ciudad Juárez, Chihuahua, Sonora, Tlaxcala, del Estado de Hidalgo, del Estado de Morelos, Metropolitana y Veracruzana; las universidades de Colima y de Guadalajara, así como tres universidades tecnológicas. 

La Universidad Nacional Autónoma de México debe renovar su carácter nacional, sustentada en la forma en que se integra a las demás instituciones de educación superior del país, abriendo sus programas de posgrado para apoyar la formación de los académicos que se requieren, descentralizando sus actividades de investigación y estudios superiores, para apoyar y fortalecer a las universidades públicas de los estados, esmerándose en perfeccionar sus planes y programas para que sean un modelo a seguir por el sistema educativo nacional y estableciendo nuevos y más efectivos esquemas de vinculación con los diversos sectores de la sociedad que pueden beneficiarse de su quehacer cotidiano.

Así lo expuso Francisco Barnés de Castro, rector de la máxima casa de estudios del país al presentar su proyecto del Plan de Desarrollo de la UNAM 1997-2000 ante los miembros del Colegio de Directores, la Junta de Gobierno y el Patronato de la institución.

En 46 cuartillas, el documento incluye once puntos, que son el reforzamiento de la planta académica, la renovación docente, el fortalecimiento de la investigación, el fomento de la difusión cultural, la participación en la solución de los problemas nacionales, el desarrollo de la cooperación académica, el impulso a la reforma estructural, la promoción de la planeación y la evaluación institucionales, el fortalecimiento de la comunicación universitaria, el avance de la reforma administrativa y la diversificación de su financiamiento.

Barnés de Castro señaló que el documento ha incorporado los puntos de vista de los universitarios a lo largo de los primeros once meses de su gestión, pero se ha puesto a consideración de la comunidad en una consulta abierta a partir del 12 de noviembre y que concluirá el próximo 16 de enero, para entonces proceder a integrar el Plan de Desarrollo.